Plusval Dominicana un equipo que afinó su puntería para crecer en linea recta.

SANTO DOMINGO.- En el año 2007 dos veinteañeros visionarios regresaron de Europa cargados de conocimientos y con el chip del emprendedurismo instalado.  Familiares cercanos cuestionaban cómo dos jóvenes que recién cursaban maestrías en el primer mundo, hablaban de vender casas y trabajar independientes y no de emplearse como ejecutivos de alguna renombrada empresa.

Exploraron opciones diversas, pero como no tenían recursos para arrancar y siendo hijos de una corredora inmobiliaria y de un ingeniero civil, entendían que el terreno estaba abonado y le sería fácil integrar una sociedad familiar y echar a andar un negocio inmobiliario. Sin embargo, no todos se arriesgan a aventurarse con dos jóvenes soñadores y cuando lo comunicaron papá y mamá le sacaron los pies a esa “locura”

Uno de los padres sabiendo que no contaban con recursos para emprender la aventura, le ofreció 30 mil pesos, pagaderos en mes y medio y muchas bendiciones. Empezaron en un pequeño local de Naco con tres escritorios y un aire acondicionado.

Al retrotraer sus inicios Eros Caamaño y Juan Chalas, no se inmutan al narrar sus comienzos. Catorce años después sienten orgullo de haber fundado Plusval y hacerle caso a sus instintos, aún cuando no les tocara nadar siempre con la corriente a su favor.

 Su filosofía fue marcar la diferencia en el mercado Inmobiliario con una identidad corporativa fresca. Eran jóvenes pero con el cerebro amplio, amueblado; tenían grandes competidores por eso se propusieron ofrecer un servicio memorable al cliente, anteponiendo la certeza de una asesoría bien informada y segura.

“Cuando empiezas a ver pequeños resultados y no necesariamente económicos, sino cuando tu vez que familias que ahorran su vida entera para ponerte en tus manos la decisión de comprar o vender un inmueble y tú lo haces bien y no te equivocas y la gente te ve varios años después y te lo agradece eso te llena mucho”, narra Eros.

Con varios meses en el negocio y cuando la abundancia aún no asomaba su puerta, a Juan le ofrecieron una posición en el sector financiero donde había trabajado previo a irse a España, que lo puso a dudar. Necesitaba renovar sus votos de confianza para no abandonar el reto. Hoy recuerda con gratitud la frase de su madre “tira p’lante que tu vas a poder”.

Llegó la fusión

Hace poco más de un año Plusval añadió el apellido Dominicana a su marca, fruto de la fusión con Venta Directa, una inmobiliaria con cerca de 15 años en la industria. La conjugación de ideas junto a Mario Almonte y Bienvenido Paulino ha tenido excelentes resultados y ha desbordado las expectativas planeadas.

Este renovado equipo ahora compuesto por tres jóvenes y un veterano se ha convertido en una maquinaria invencible que acumula la mayor cantidad de proyectos en exclusiva del polígono central.

Paulino es un experimentado agente con casi 36 años en el campo inmobiliario, con una pulcra e intachable imagen. Se ha convertido en el guía de quienes llama “mis hijos”, a quien cuida y frena si nota algún intento de cruzar la vía contraria.

Mario Almonte el “Maluma” del equipo explica que los unió la visión de ayuda. “La diferencia entre vender un apartamento y ayudar a alguien a hacer una inversión de compra”, es lo que nos identifica.

Junto a su esposa Lisa Rijo y Paulino venían desarrollando negocios conjuntos con sus amigos Eros y Juan, a quienes conocía antes de coincidir en el sector. La educación continuada es un elemento que destaca como fortaleza de la marca.

“Quienes me conocen en este negocio me escuchan decir la frase que menos es más y algunas veces la gente piensa en el inmediatismo yo siempre he visto un poco más allá. La unión de dos fuerzas como la de nosotros que nos complementábamos y teníamos muy buena relación podía ser la diferencia en poder catapultarlos más rápido”, explica Paulino.

Se sorprende con los resultados logrados con la unión “ha sido de tal manera que nosotros tenemos un año y algo juntos y nuestra productividad ha subido dos veces y medio de lo que éramos individual. Tenemos filosofía y visiones semejantes.”.

Plusval Dominicana tiene 30 empleados asalariados, 165 corredores,  5 filiales en Distrito Nacional, Santo Domingo Oeste , Santiago y Punta Cana. Más de 70 proyectos en exclusiva y entre 3 mil a 3,500 propiedades.

Juntarme con esa juventud-dice el sabio agente- era simplemente poner las ideas y energías a trabajar, cada uno tiene su propia fortaleza, pero más que nada una característica que nos sella es que respetamos nuestras diferencias, estamos halando para un mismo camino y no individual.

En todo negocio hay oportunidades y amenazas, todo tiene sus altas y bajas “como industria hemos crecido muy bien y prueba son las agencias que hay  hoy día, no sabemos cuantos somos, pero sin lugar a dudas que a nivel nacional gente que trabaja en el sector son miles”.

Eros observa que ese crecimiento es una fortaleza que al no darse organizado se ha traducido en una amenaza para el sector “no haber una regulación a quien entra y la barrea de entrada al negocio es fácil para todo tipo de persona que muchas veces da un servicio inadecuado”.

En su surgimiento trabajaban con un target clase media de entre US100 a US200 mil, limitado al polígono central. Se han expandido con clientes bajos, medios y de alta gama, avanzando hacia Cap Cana, Las Terrenas y el Sur del país. De la fusión heredaron el liderazgo por proyectos económicos con Don Bienvenido a la cabeza; están incursionando en el tema comercial, los alquileres van viento en popa, en definitiva Plusval pica y se extiende.

Una particularidad de esta agencia es que escogen los proyectos que venden. Este cuidado les garantiza a los adquirientes contar con propiedades depuradas y confiables, donde el comprador despejará todas las dudas que necesites sin traumas ni dilaciones.

Como columna vertebral del trabajo, la compañía se esmera porque su fuerza de venta se mantenga a la altura del mercado, capacitándolos permanentemente. “Tenemos más de 100 horas de capacitaciones, muchas de ellas con expositores de talla mundial que han venido al país en exclusiva a diseñarnos nuestro programa de venta de la A a la Z”, apunta Mario.

Agrega que desde el primer día un vendedor de Plusval Dominicana recibe la inducción y más de 100 horas de contenido educativo, incluyendo cursos sobre todo el quehacer de la industria.

 De hecho-cuenta Eros- nuestra gestión como líderes está ahora mismo más enfocada a entrenar que a vender propiedades, gerenciando nuestros clientes que ahora mismo son nuestros corredores a los que tenemos que capacitar para que hagan un buen trabajo.

Sus líderes han querido que la compañía camine lenta pero con pasos firmes. Se identifican con la calidad, más que la cantidad. Es de las únicas plataformas que no le cobran matrícula a sus agentes porque apuestan a su  productividad, tienen una baja tasa de rotación, con personal con más de 12 años laborando. No quieren llamarse los líderes del mercado, pero saben que están en la primera fila y eso los llena de orgullo y mucha satisfacción.

Fuente Inmobiliario.do